La mesoterapia facial puede beneficiar a cualquier persona que desee mejorar la calidad de su piel. También es un tratamiento antienvejecimiento excelente y eficaz y se adapta a todas las personas que tienen problemas de piel como cicatrices y pigmentación del acné. Este tratamiento complementa los resultados de otros procedimientos de medicina estética, como los rellenos dérmicos. La mesoterapia tiene muy pocos efectos secundarios y el procedimiento es adecuado para todo tipo de piel. Por lo general, los pacientes comienzan a recibir tratamientos de mesoterapia facial a finales de los veinte y no hay límite de edad superior; sin embargo, existen restricciones ya que la mesoterapia no está autorizada para su uso en niños y no está permitida durante el embarazo y la lactancia.